Curiosity killed the cat.
Curiosity killed the cat.
El dicho 'Curiosity killed the cat' demuestra cómo la curiosidad excesiva puede llegar a ser perjudicial. Si alguna vez te has preguntado por qué debes mantener un cierto límite al indagar en asuntos ajenos o peligrosos, este refrán encapsula perfectamente esa prudencia. Aunque nace de una observación algo humorística sobre la naturaleza inquisitiva de los gatos, nos deja una enseñanza vital sobre el riesgo de indagar más de lo necesario. En tales situaciones, el refrán sugiere que es mejor mantener una cierta prudencia y cautela para evitar problemas innecesarios o consecuencias no deseadas.
She told me not to snoop around, saying curiosity killed the cat.
Me dijo que no investigara, diciendo 'la curiosidad mató al gato'.
Her curiosity about the secret files might end badly; curiosity killed the cat, after all.
Su curiosidad sobre los archivos secretos podría terminar mal; después de todo, 'la curiosidad mató al gato'.
Digging too deep into their personal life can be risky; remember, curiosity killed the cat.
Indagar demasiado en su vida personal puede ser arriesgado; recuerda, 'la curiosidad mató al gato'.